La Iglesia Parroquial de San Andrés de Zarza la Mayor, declarada Bien de Interés Cultural

La iglesia parroquial de San Andrés, de la localidad cacereña de Zarza la Mayor, ha sido declarada como Bien de Interés Cultural (BIC) en la categoría de Monumento.

En concreto, el Diario Oficial de Extremadura (DOE) ha publicado este lunes esta declaración para esta iglesia, "un edificio singular, con valores históricos y artísticos incuestionables, muestra de la arquitectura religiosa de la zona del Tajo-Internacional".

En su construcción participaron destacadas personalidades del renacimiento extremeño como el maestro de la Orden de Alcántara Pedro de Ybarra, Juan Bravo y Alonso Hernández Acosta en su última reedificación en el XVII. Su valor también radica en la propia imagen del edificio con una imponente fachada de estilo herreriano frente a la Casa de la Seda y la Casa de la Encomienda, muestras del destacado pasado histórico de la población, según relata la Junta de Extremadura en una nota de prensa.

La iglesia, además, alberga la imagen del Jesús resucitado que, junto a la Virgen del Castillo de la Ermita del mismo nombre, "protagonizan uno de los rituales más representativos de la localidad, el Domingo de los Tiros, con el que los zarceños se sienten especialmente identificados", señala.

TRES PORTADAS

Cabe destacar que el edificio cuenta con tres portadas, la portada del lado norte es sencilla con arco de medio punto de rosca y jambas rehundidas y dos triángulos en las enjutas y cornisa en voladizo.

Mientras, la portada del muro sur, al igual que la anterior, es de medio punto sobre pilastras y en las enjutas dos triángulos, coronada por frontón partido con cruz en el centro y remates laterales con bolas, rematándose el conjunto por un friso con motivos geométricos, mientras que la portada de la fachada principal, de estilo herreriano, está situada a los pies del templo y está realizada en sillería.

Del interior, hay que reseñar que la iglesia tiene una única y espaciosa nave de tres tramos con columnas empotradas en los muros, con transepto y presbiterio poligonal cubierto por bóvedas de crucería estrellada, recurriéndose en los brazos del crucero a las bóvedas de medio cañón sobre esbeltos y finos arcos fajones.

El resto de las estancias, que sobresalen de la planta en el lado sur, son la sacristía cubierta con bóveda de cañón sobre finos arcos fajones; una capilla con una sencilla bóveda de crucería y la torre que no llegó a concluirse y que fue rematada por una espadaña en el XIX. Se aprovechó este espacio para albergar la capilla bautismal en el XVIII. A los pies se levanta el coro, también sobre bóveda de crucería estrellada, al que se accede por un arco carpanel.

Además, la iglesia alberga dos retablos del siglo XVIII, uno de ellos es el Retablo de las Ánimas, de unos cuatro metros de altura y el retablo de la Virgen del Carmen, con una altura similar que el anterior.

Finalmente, en el lado de la Epístola se exponen otros dos retablos, también barrocos de mediados del XVIII, el Retablo dedicado a la Virgen del Amor Hermoso y el Retablo de la Milagrosa, que presenta una imagen de vestir de La Dolorosa, del XVIII. La estructura se remata con la imagen de San Blas, también del mismo siglo.