El artista Roberto Coromina expone su "diario visual" en el Hospital Centro Vivo de Badajoz a través de la muestra 'Tenía los ojos cerrados, estaba soñando', que podrá visitarse hasta el próximo 8 de junio.

En concreto, 'Tenía los ojos cerrados, estaba soñando' es una intervención en el espacio que sólo ha sido descubierta cuando sus pinturas se han dispuesto para su apertura al público.

De hecho, el propio autor ha confesado que no había visto el trabajo unificado hasta que se terminado de instalar en la Sala Vaquero Poblador del Hospital que podrá recibir visitantes hasta el 8 de junio.

Se trata de pinturas que han dado resultado a nueve meses de creación de piezas en las que el cielo y la tierra están representados en unión.

A su vez, Coromina ha explicado a los primeros visitante en la inauguración que, gracias a la adaptación a las características especiales de la Sala, ha creado un reflejo de la constelación del hemisferio norte que se observa en el mes de abril desde Badajoz.

Un completo paseo por planetas que hace referencia a una cita del Quijote y en el que hay influencias de artistas reconocidos.

Así, las obras invitan al espectador a sumergirse en un campo de color y línea concebido con "intensa atención y aprecio por la forma y el espacio", según informa en una nota de prensa la Diputación de Badajoz.

En 'Tenía los ojos cerrados, estaba soñando', la repetición del gesto y el ritual del hacer se convierten en meditaciones sobre el tiempo, la memoria y la presencia.